Por David Pérez Arce
La municipalidad adquirió esta propiedad, realizó obras de restauración y creo la Casa de la Cultura, que es el rol que juega en estos instantes.
La vetusta casona colonial, construida en adobes y tejas, construida en el siglo XVI, ubicada en la avenida Cachapoal con Millán, tiene su historia, ligada a la ciudad de Rancagua.
Allí se cobijó Mariano Osorio, quien comandó la tropa que luchó en aquellos días, 1 y 2 de Octubre de 1814. Osorio estableció su cuartel general en esa casona.
Allí funcionarios, a principio del siglo pasado, dos establecimientos educacionales. Primeramente la Escuela de Artesanos que seguidamente se convirtió en la Escuela Industrial.
Al trasladarse la Escuela Industrial a la avenida Baquedano, la Casona que fue el Cuartel de Osorio, cobijó un establecimiento de educación de niñas de reciente creación, la Escuela Técnica Femenina.
Al ser propiedad de la Sociedad de Establecimientos Educacionales, se inició la demolición de la casona, jugando un rol importante el Intendente de la época. Renato García Vergara quien ordenó la paralización de la demolición, salvado menos de la mitad de la casona.
La municipalidad adquirió esta propiedad, realizó obras de restauración y creo la Casa de la Cultura, que es el rol que juega en estos instantes.
Lamentablemente el terremoto del 27 de Febrero del 2010, le causó severos daños. Por tratarse de un edificio considerado Monumento Nacional, no es fácil intervenir y es la razón del porque la demora en iniciar su restauración.la que está en ejecución, en estos instantes, que permitirá que Rancagua pueda seguir contando con un inmueble que es parte de la historia de Rancagua, cuyos muros fueron mudos testigos de aquellos trágicos días de 1814.
