La autoridad sanitaria respondió, tajantemente, al Consorcio Hospital Rancagua S.A, que argumentó que los retrasos en la construcción se debían a aumentos de obra. “Se firmó un anexo de contrato, pero para construir lo que ya estaba atrasado”, precisó Fernando Troncoso.
El Director del Servicio de Salud O´Higgins, Fernando Troncoso, se refirió hoy a la declaración pública que envió en Consorcio Hospital Regional S.A, en relación a que los aumentos de obras, son la razón de los retrasos en la construcción del edificio.
La autoridad sanitaria explicó que existen diversos informes, emanados de la Inspección técnica y la Contraloría, que demuestran que la empresa ha tenido deficiencias en la administración del contrato. Esto se ha manifestado en la constante rotación de personal, incumplimiento de profesionales adecuados, falta de mano de obra y problemas financieros del Consorcio (quiebra de COMSA).
“En abril se firmó un último anexo de contrato con la empresa por 64 días, plazo planteado por ellos mismos y que corresponde a trabajos que ya estaban retrasados, incluso que datan desde el 2012. Y otros que son requerimientos de la autorización sanitaria. Nosotros no hemos encargado nuevos aumentos de obra. Lo que se hizo fue cerrar todo lo que estaba pendiente para el término de la misma”, aseguró Troncoso.
Con respecto a un supuesto “perjuicio” económico al que alude la empresa, la autoridad sanitaria es tajante en señalar que “a la fecha el Estado de Chile ha cancelado todos los estados de pago asociados al avance de obra y conforme al contrato. Además, se han pagado todos los gastos generales correspondientes a las modificaciones de contrato”.
Visita de notario público a la obra
En el marco de transparencia que ha querido establecer esta administración, este lunes se concretó un nuevo recorrido en la construcción, junto al notario Ernesto Montoya, para constatar en terreno los retrasos del nuevo Hospital Regional.
Al término de la ruta, el Director de SSO, detalló que “el avance de obra es del 94% y el retraso está distribuido en todo el edificio, pero algunas cosas son visibles. Por ejemplo, cerámicas que no se han pegado, terminaciones de pintura, ventanas, concreto, entre otros. Por esta razón, hemos decidido verificar en terreno y junto al notario Ernesto Montoya, estos retrasos, como un símbolo de transparencia en nuestra gestión”.
Por su parte, el abogado y notario de Rancagua, Ernesto Montoya, indicó que “dentro de mi función vengo a dar fe de los hechos que perciben mis sentidos, porque no soy ingeniero, yo soy abogado. No obstante, he podido percibir que hay una obra inconclusa y no hay que ser técnico en la materia, para saber que es imposible que la obra se entregue en 60 días”, afirmó Montoya.