En un 50,6% respecto a la misma medición del año 2011 subió el consumo de cannabis. La mayor alza se registró en los cuartos medios con un aumento del 49%. Además se observó un aumento significativo del consumo de cocaína en los colegios particulares pagados.
El Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (SENDA) dio a conocer los resultados del 10º Estudio Nacional de Drogas en Población Escolar, que reveló un importante aumento porcentual en el consumo de marihuana, subiendo 11 puntos porcentuales, es decir un 56,9% respecto a la misma medición del año 2011.
El estudio, que se realizó entre los meses de octubre y diciembre de 2013, abarcó a 121 comunas de todo el país y a más 58 mil estudiantes (hombres y mujeres), entre octavo y cuarto medio de colegios municipales, particulares subvencionados y privados pagados. El nivel de confianza de la encuesta es de 95%, con un error muestral de 0,47%.
Para la región de O’Higgins, la muestra efectiva fue de 4.407 alumnos que representan a 46.462 alumnos de 8° básico a 4° medio de colegios municipales, particulares subvencionados y particulares pagados de la región.
La distribución de la muestra por sexo fue de 2.195 hombres y 2.194 mujeres. Además, la distribución de la muestra efectiva por cursos muestra que se levantaron 1.839 casos entre 8° básico y 1° medio, y 2.568 entre 2° y 4° medio.
Las comunas encuestadas en esta versión del estudio fueron Rancagua, Coltauco, Graneros, Machalí, Rengo, San Vicente, San Fernando, Chimbarongo y Santa Cruz.
Rodolfo Núñez, Director de Senda O’Higgins señaló “las cifras están a la vista, hubo una política preventiva que no funcionó, no se cumplieron las metas. No se logró reducir en un 15% la prevalencia anual de consumo de marihuana en población escolar. Tampoco se disminuyó en un 10% la prevalencia anual de consumo de cocaína, ni se redujo en un 15% la prevalencia anual del consumo de alcohol en población escolar, estas metas estaban planteadas en la Estrategia Nacional de Drogas 2011 – 2014 del gobierno anterior”
Las declaraciones sobre consumo de marihuana en la región de O’Higgins en el último año, muestran un aumento respecto del estudio anterior. Los reportes del año 2013 llegan a un 29,0%, con una variación significativa de 14,7 puntos porcentuales respecto del estudio 2011. Al observar la serie completa de estudios se aprecia que este es el punto más alto de toda la serie, encontrándose por debajo de la prevalencia nacional (30,6%).
Sobre las causas el Director del servicio señaló que “la metodología aplicada no fue la correcta; se disminuyo a casi nada el trabajo en los territorios, sin recursos humanos ni económicos es muy difícil llegar a la comunidad a realizar un buen trabajo preventivo, los programas se enfocaron de manera selectiva y no universal”
Uno de los puntos positivos del estudio arrojó que en la región de O’Higgins la prevalencia diaria de tabaco muestra una variación respecto del último estudio, pasando de 7,4% en 2011 a 6,6% en 2013. Se trata del resultado más bajo de toda la serie por segundo año consecutivo, ubicando a la región por debajo del promedio nacional (7,3%) y manteniendo la tendencia a la baja observada en los últimos estudios.
Núñez además señaló que las políticas públicas de prevención de drogas ilícitas en los últimos años, no han podido dar respuesta a los múltiples cambios sociales que se han registrado. “Se ha trasparentado el consumo de marihuana en el escenario nacional e internacional, con un discurso social que disminuye la percepción de riesgo de los estudiantes. Esto debemos aclararlo, una cosa es la libertad que tiene una persona adulta frente a este tema, están en todo su derecho, pero otra cosa muy distinta es el daño real que provoca en un niño de 8° básico el consumo de marihuana”, aseguró el director de SENDA.
La prevención de las drogas y el alcohol recae en un trabajo conjunto de SENDA con los distintos servicios, se debe realizar un trabajo intersectorial, este enfoque fue dejado de lado durante la administración anterior y habría sido una de las razones del alza del consumo de la marihuana. Por esta razón, el director de SENDA sostuvo que se “se retomará la articulación con otras instituciones vinculadas en el proceso de desarrollo de niños y adolescentes para procurar revertir la tendencia en crecimiento que arroja el estudio, considerada como sumamente preocupantes”.
Para el 2014-2018 se implementará una política de drogas con enfoque de salud pública, local y comunitaria, centrada en los determinantes sociales, fortaleciendo la prevención a lo largo de todo el ciclo vital, reforzando el trabajo de todos los ministerios involucrados en esta tarea.
Otros Resultados
Consumo de Alcohol
Las declaraciones de uso de alcohol en el último mes en la región se ubican por encima del promedio nacional con 36,2%. Respecto a la trayectoria del indicador, desde el año 2007 se observaba una tendencia a la baja, la cual se detuvo con los resultados del presente estudio, la prevalencia pasó de 34,1% en 2011 a 36,2% en 2013, variación que no es estadísticamente significativa.
Consumo de Cocaína Total (cocaína y/o pasta base)
La prevalencia regional de consumo de cocaína total en el último año es de 3,4%, lo que muestra un aumento, no significativo, respecto al estudio anterior de 0,5 puntos porcentuales (2,9% en 2011). Al analizar la tendencia de la serie de estudios se aprecia que el registro para el uso de esta droga tiende a ser fluctuante y, por cuarto estudio consecutivo, se encuentra por debajo de la media nacional (4,8% en 2013).
Consumo de Inhalables
La prevalencia de consumo de último año de inhalables, a nivel nacional, muestra por segundo año consecutivo un aumento significativo (variación en tendencia) variando desde 3,0% en 2009 a 5,2% en 2013. En la región de O’Higgins, la prevalencia año de consumo de esta sustancia pasa de un 3,3% en 2011 a un 3,8% en 2013 (variación no significativa), valor que se encuentra por debajo de la prevalencia nacional.
Consumo de Tranquilizantes sin receta médica
A nivel nacional se aprecia un aumento significativo en los reportes de tranquilizantes sin receta médica1 en el último año, pasando de un 7,5% en 2011 a un 9,5% en 2013, siendo este último el valor más alto de toda la serie de estudios. En la región de O’Higgins, también el consumo de esta sustancia aumenta significativamente, desde un 5,4% en 2011 a un 8,9% en 2013.