Por Carolina Pérez Araya
Las terapias complementarias cada vez ganas más seguidores, pues son muchas las personas que han visto los efectos positivos que éstas entregan, una de ellas el REIKI, terapia que se realiza a través de la imposición de manos, entregando energía a la persona, armonizando sus chacras o centros energéticos, los cuales comienzan a funcionar equilibradamente.
Conversamos con la Terapeuta Paula Pérez, quién tiene la Maestría en REIKI USUI y que nos comentó de los beneficios y la historia de esta milenaria terapia.
¿De dónde viene el Reiki?
Viene de Japón, fue desarrollado por el Dr. Mikao Usui, un monje japonés a fines del siglo pasado. El perfeccionó la técnica de canalizar la energía, siendo el gran maestro de REIKI, occidentalizado por una mujer estadounidense, quién fue paciente del sucesor de Usui, Dr.Chijiro Hayashy a mediados de los años 40.
Actualmente Reki es representado por dos organizaciones que han sucedido a la inicial, ambas están en EEUU. Es una práctica que se transmite de enseñante a aprendiz, pero para las personas que requieran esta terapia pueden recibirla de cualquier Maestro de esta disciplina, ya que hay más de 300 tipos de Reiki, yo vengo del linaje USUI, que es el primer grado, el tradicional y el que te permite llegar a otros tipos de Reiki.
¿Cómo se entrega la energía Reiki?
Es una canalización energética universal, a través de imposición de manos. La que armoniza cuerpo, mente y espíritu. Una sesión puede durar alrededor de 30 minutos o mucho más, porque depende de cada paciente y lo que valla requiriendo, algunas veces debemos quedarnos un poco más de tiempo en cada chacra.
Es necesario realizarlo con el paciente acostado, ya que relaja mucho y en un lugar tranquilo.
¿Cuáles son los beneficios que entrega esta terapia?
Puede actuar en terrenos a nivel físico, mental y espiritual, reduciendo por ejemplo el estrés, quitando un dolor físico o espiritual. Reiki puede actuar de dos maneras, directamente sobre el problema o cambiando la forma de verlo.
Las enfermedades físicas tienen una base emocional para el Reiki, esta terapia ayuda a que el paciente logre ver su atadura emocional que le está causando esa enfermedad o dolor físico, cambiando su forma de actuar y con esto terminando o debilitando la enfermedad. Es importante recalcar que cuando una persona ya tiene una enfermedad crónica, Reiki no lo sanará milagrosamente, esta terapia trabaja de la mano con el tratamiento médico que tenga un paciente, la idea es mejorar su calidad de vida.
¿Por qué se debería tomar una terapia de Reiki?
Reiki trabaja en conjunto con el paciente, se conversa mucho y de hecho la sesión es personal. Lo primero es la relajación que se logra, lo que no significa quedarse dormido, desbloquea para poder encontrar soluciones a diferentes problemas o enfermedades. Esto repercute a que la relajación permite tomar buenas y nuevas decisiones, mirara el problema desde otro punto de vista.
¿Quiénes pueden hacerse Reiki?
Todos, niños, adultos mayores, enfermos crónicos, jóvenes, adolescentes, todos. Reki no tiene contraindicación.
Son muchas las personas que acuden a realizarse terapias complementarias, con la finalidad de encontrar una segunda opinión u opción que les permita mejorar la calidad de vida, estas terapias además le entregan herramientas de cambio, una mirada diferente a la problemática diaria con la que todos debemos convivir, pero mejor si lo hacemos con una mirada positiva y constructiva.
Si usted quiere experimentar la energía sanadora que entrega el REIKI, puede visitar a Paula en su centro Holístico “Relajo y Despertar” ubicado en la Villa Urzúa, calle Tarapacá #446, Fono: 2231267 / 684492212, Rancagua.
