Por David Pérez Arce
El paso fronterizo Pehuenche, tiene una altura de 2.550 metros sobre el nivel del mar, está ubicado en la Séptima Región del país.
Inaugurado hace cinco años, la nieve se transforma en el peor enemigo del paso Pehuenche, que desde su apertura el 2012 no ha podido funcionar con plenitud. Las constantes tormentas han conspirado con la utilización de este camino, en el que se invirtieron más de US$ 130 millones, pensado en que se seria la alternativa más cercana, ante el colapso del complejo Los Libertadores.
Si la nieve constituye un problema, para las autoridades regionales, el tema más complejo es la mantención.
El presidente de la Comisión Paso Pehuenche, Marcelo Rojas, una ONG conformada por empresarios y vecinos de Talca, desde la inauguración de este cruce han abogado por la apertura y despeje de un camino que ha permanecido inabordable durante los últimos tres inviernos.
A las falta de maquinarias, instalaciones, bodegas y una aduana oficial, se suma el casi nulo despeje de la vía.
