Por David Pérez Arce
De las nuevas generaciones de políticos que se dieron a conocer, una de ellas, que apareció reluciente es la dirigente estudiantil Camila Vallejo que comandó el equipo de estudiantes que provocó un movimiento sin precedentes en la educación.
Las convocatorias de marcha de unos cien mil adherentes llamaron poderosamente la atención, convirtiéndola rápidamente en una líder estudiantil y que se encaminaba a convertirse en un diputado.
Camila Vallejo llegó a la cámara baja con una alta votación popular y luego fue decayendo estrepitosamente, al punto de ser en estos instantes la parlamentaria peor evaluada según la encuesta CEP, que la margina de futuras postulaciones.
De las nuevas generaciones no se ven candidatos a parlamentarios que aparezcan en estos instantes, es más, el movimiento estudiantil ha perdido fuerza y las tomas de establecimiento han ido encontrando una manifestación adversa en la ciudadanía
