El movimiento “Viticoautores”, formado por Vultur, Singular Wines, OWM y Tringario, presentó la Cosecha 2019 de su línea de vino Cartesiano, que esta vez incluye cepas como chacolí, chicha, pipeño y vino de pasas.
La Viña Santa Blanca fue el escenario para la presentación de una producción limitada, cercana a las 5.000 botellas, de cepas patrimoniales que se producen en la Región de O’Higgins y que son destacadas por un grupo de jóvenes enólogos y productores locales.
El movimiento formado por Vultur, Singular Wines, OWM y Tringario, los autodenominados “Viticoautores”; se propuso llevar a cabo este rescate histórico, proyecto que pudo concretar con recursos provenientes del Fondo de Innovación Agraria, FIA, los que se utilizaron para la compra de infraestructura como nuevas cubas de acero inoxidable.
Cartesiano nace y se produce a partir de uvas compradas a pequeños productores de la región, ubicados en zonas como Rinconada de la Mina (Pumanque), Las Pataguas y San Pedro de Alcántara.
Sofía Silva, Directora Regional de ProChile en O’Higgins, comentó que “este tipo de iniciativas contribuyen no sólo a potenciar y desarrollar nuestro trabajo con los pequeños productores; sino que también a nuestro relato a nivel internacional. Este tipo de vinos, hechos a escala humana, son cada vez más apreciados en el extranjero, donde se reconoce el valor del territorio y el trabajo casi artesanal que hay detrás de cada una de estas botellas”.
Silva agregó que “desde ProChile apoyamos decididamente la internacionalización de este tipo de empresas, ya que además de servir como estímulo para la economía local, son un ejemplo de asociatividad y sustentabilidad entre otros atributos”.
En efecto, Tringario Wines destaca por la utilización de cajas de cartón neutras (sin tinta) y botellas de vidrio livianas. “Uno de nuestros propósitos es minimizar nuestro impacto en el medioambiente”, dice José González, enólogo y propietario de la viña que actualmente exporta a mercados como Brasil y Estados Unidos.
Tringario cuenta con una autocertificación que asegura la ausencia de cualquier componente animal en la elaboración del vino. De esta manera, asegura, puede ser considerado como un vino vegano. “Tal vez acá en Chile estos detalles no son tan importantes, pero en el extranjero sí lo es y eso nos da un plus como marca”, agrega González.
La actividad se desarrolló en el marco de la Semana de la Pyme, ocasión que sirvió para que ProChile destacara a Tringario dentro de las pequeñas empresas de la Región de O’Higgins.
