La medida busca aliviar el agotamiento de quienes, en muchos casos, trabajan más de 17 horas continuas en condiciones exigentes y sin descanso adecuado.
Ante el agotamiento y descontento manifestado por miles de vocales de mesa tras los recientes comicios regionales y comunales, la diputada Natalia Romero propuso otorgar la mañana libre a quienes deban trabajar el día siguiente a las elecciones.
La legisladora destacó que «el esfuerzo realizado por los vocales, quienes en estas elecciones enfrentaron jornadas que superaron las 17 horas continuas, merece reconocimiento y condiciones dignas para asegurar su bienestar».
Según la diputada Romero, la maratónica jornada de dos días, con más de 30 horas trabajadas en un fin de semana y condiciones climáticas adversas, generó un evidente malestar entre los vocales.
«Recibimos testimonios de muchos vocales que expresaron su cansancio e incomodidad directamente a los delegados de locales de votación y al personal del Servel, quienes no tienen relación con esta designación, y tampoco con la falta de condiciones laborales adecuadas para quienes cumplen con esta responsabilidad cívica», explicó la congresista.
La legisladora explicó que propone «mañana libre», ya que a principios de este año se discutió la idea de otorgar un día libre a los vocales de mesas que cumplan con su labor. Sin embargo, dicho proyecto no prosperó por lo que se espera que esta iniciativa encuentre más respaldo parlamentario.
Si bien quienes cumplen esta función reciben un bono de $25.290 por día, la alta exigencia laboral, sumada a la presión de cumplir con el escrutinio en tiempo récord, generó frustración en los más de 200 mil vocales de mesa que participaron en este proceso y que deberán repetir la labor en la segunda vuelta de las elecciones de gobernadores el próximo 24 de noviembre en 11 regiones del país.
«Los vocales cumplen un rol esencial en el desarrollo de los procesos electorales y, por lo mismo, no se puede seguir exigiendo que trabajen en estas condiciones sin un descanso adecuado», añadió.
Romero argumentó que esta propuesta, además de reconocer su rol contribuiría a evitar situaciones de tensión y reclamos en futuras elecciones: «Creo que darles la mañana libre después de estas intensas jornadas es una medida justa y necesaria. Se trata de ciudadanos comprometidos con la democracia, y la misma democracia debe garantizarles un trato digno».
Cabe mencionar que, con la actual legislación, los vocales que no cumplan con su obligación podrían ser sancionados con multas que varían entre 2 a 8 UTM, es decir, entre $133.122 y $532.488, por lo que se trata de una labor obligatoria.