Por David Pérez Arce
La ceremonia religiosa en la Iglesia La Merced que se realiza el 1 de Octubre, cada año, es para recordar a los caídos durante la Batalla de Rancagua.
Este oficio religioso lograba especial notoriedad, al contar con la presencia de una delegación de la Escuela Militar, que lamentablemente fue dejada de lado.
En la mañana de ayer, esta formación le dio realce a esta ceremonia el relato entregado por el historiador Héctor González al nivel de quien ha dedicado muchos años a buscar cada detalle y antecédete sobre este acontecimiento bélico, en el que termina el periodo de la Patria Vieja y donde se inicia la etapa final para conquistar nuestra independencia.
El que los efectivos de la Escuela Militar, acompañado de su banda instrumental, hayan interpretado nuestro himno nacional, fue el coronario esperado en esta histórica conmemoración de los 200 años de la batalla de Rancagua.