Por Carolina Pérez Araya
La semana pasada funcionarios de Gendarmería que trabajan en la cárcel concesionada de Rancagua, realizaron manifestaciones en las afuera de ésta, con la finalidad de rechazar los cambios de turnos que se les imponía desde nivel central.
En la oportunidad al conversar con el Alcaide del Recinto Penitenciario este manifestó que los cambios permitirían una mejor atención en la seguridad penitenciaria y que tenía como objetivo evitar los hechos que han marcado a la institución este año.
Conversamos con el Director Regional de Gendarmería de O’Higgins, Coronel Christian Alvear Gutiérrez, quién nos comentó sobre el acuerdo entre la institución y los funcionarios.
“En ese escenario nosotros justificábamos técnicamente esta necesidad de cambiar el sistema de turno, es una decisión en el contexto también administrativo, estábamos en este proceso, incluso en algunas reuniones y mesa de trabajo con dos representantes de la ANFUP. Lamentablemente no fueron bien entendidos lo que nosotros queríamos hacer, pese a que se insistió, que el cambio de turno también beneficiaba las condiciones de seguridad del mismo personal, de los internos y la estabilidad laboral por cierto. Sin embrago ellos se reunieron con el mando a nivel central y éste decidió suspender esta implementación, mientras esto no se revise en carácter nacional, de tal forma de instalar un sistema de turno equitativo para todo el personal que trabaja en trato directo con toda la población penal, de acuerdo a las necesidades institucionales y a la disponibilidad de personal.
Esta decisión deja a la Cárcel Concesionada de Rancagua, como el único establecimiento don se realiza el turno 1×1, esto quiere decir se trabaja un día 12 horas y al otro se descansa, lo que equivale que el personal sólo trabaja 15 días al mes.
“Entiendo que este es el único penal que trabaja en estas condiciones, donde el Gendarme más antiguo, en este caso puntual un sub oficial o el Gendarme menos antiguo, con dos o 3 años de servicio, trabaja con el mismo sistema de franquía y eso para nosotros era totalmente inviable por las necesidades del servicio, porque a nosotros como institución, nos exigen ser un aporte a la seguridad pública y en este caso la seguridad se entiende con un control eficiente de las penas privativas de libertad o de penas en este caso por privación de libertad por estar imputados de un delito, pero además contribuir a la reinserción social, entonces en estas últimas tareas además de tener déficit en la materia de seguridad, también estábamos incumpliendo con algunas tareas de reinserción social, porque justamente no teníamos el personal suficiente, entonces esta readecuación iba a permitir que nosotros, con un mínimo, íbamos a poder operar conforme a las bases de licitación que están en el contrato entre el estado y el privado. Nuestra intención era esa, la decisión institucional se acata, no se cuestiona y entendiendo que por un bien superior, aplazarla hasta cuando se haga esta revisión a nivel nacional y se implemente un sistema para todo el personal de trato directo, en todos los establecimientos penales sean estos concesionados o tradicionales.”
Mientras a nivel central se revisa las condiciones espaciales de funcionarios de Gendarmería en Rancagua, es de esperar que no sacuda la pauta noticiosa otro hecho, donde se muestre nuevamente el déficit y la premura con que se trabaja en la Cárcel de Rancagua.
Tal como lo comentara el Director Regional de Gendarmería, en un breve plazo se deben tener noticias de estos cambios, además de que la Institución está a la espera del Ministerio de educación de acreditar la formación de estos profesionales, con la finalidad de aumentar los años de estudio y preparación, se sabe que los delincuentes están operando con nuevas herramientas y formas, por lo que se hace necesario un cambio en la formación del personal que debe tratar día a día con los internos y a demás cumplir el rol de reinsertarlo socialmente.
