Por David Pérez Arce
Era todo un desafío el organizar una competencia internacional, con un deporte atractivo pero que no cuenta con un público que pueda presenciar la competencia desde un lugar cómodo.
El escenario deportivo es el mar y la atracción principal, son las olas que se constituyen en el desafío que deben sortear los deportistas que practican el surf.
En la tarde del sábado, se conjetura unas mil quinientas personas, las que presenciaron este campeonato internacional, que por primera vez se efectúa en Pichilemu y al que concurrieron figuras que han participado en competencias que se han efectuado en otros países .
La figura que se llevó los premios, la admiración y los aplausos, fue Dax McGill que con sus 16 años exhibió una destreza para desafiar las olas, además de tener que soportar el frio que es característico en Pichilemu.