Una atrevida e innovadora apuesta es la que realiza la empresaria de Machalí, Paula González Droguett, quien a pesar de la fuerte entrada de los juegos electrónicos en diferentes soportes y el incremento de las redes sociales, ha decido crear y rescatar los espacios de juegos para niños a través de sus “Rukas”, y que ya comercializa entre Puerto Montt y La Serena.
Con una altura máxima de 2 metros, y aplicación de diversos diseños, Paula diseña las rukas, llenas de colores y vida, de acuerdo a las demandas de los clientes, y particularmente, la atracción de los niños.
Flores, franjas, arboles, animales, aves, rostros y figuras geométricas, son parte de los diseños de las rukas de telas lavables, confeccionadas en lonas, lonetas y telas de algodón, que soportadas bajo maderas cónicas y unidas con soga yute y base con protector de humedad, le dan la simpleza de la calidad, creando verdaderos refugios para los niños, indoor y outdoor, quienes en sus espacios recrean historias, aventuras y juegos, además de guardar sus juguetes y pequeños tesoros.
La calidad de la Rukas, los diseños y su funcionalidad ha sido muy bien acogida por los clientes, tanto padres, abuelos y educadoras de párvulos, quienes han visto en este producto una solución a la fuerte tendencia individual que han experimentando los menores, estimulando las rukas a la sociabilización, juegos y el respeto por los espacios, además de ser atractivas, llenas de colores y formas, que estimulan los sentidos de los niños y niñas.
Consultada por la iniciativa empresarial la empresaria destacó que “al quedar cesante, potencié mis habilidades en diseño y confección, desarrollando productos distintos y llamativos y durante un tiempo venía observando cómo los niños y niñas de apoco perdían ese sentido de espacio y juego en común; hice mis primeros prototipos para ser evaluados por amigos y familiares, quienes junto con valorar mis productos, fueron indicándome mejoras y desde ahí comencé a desarrollar productos de acuerdo a la necesidad de los clientes.”
Aprovechando las tecnologías que ofrece internet, Paula comercializa sus productos a lo largo de todo Chile, vía Facebook, proyectando un crecimiento escalable a corto plazo y que ya, a pesar de su corto nacimiento, ya tiene una persona contratada a tiempo parcial.
Paula no deja de soñar, y sus próximos desafíos ya están en construcción. Actualmente se encuentra elaborando lo que ha llamado “El Almacén”, un espacio donde niñas y niños interactuarán con frutas, jugos y sus propios juguetes, enmarcado en el sello de los colores y diseños de Rukatela, que dan un valor único a cada producto.
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