A través un convenio de transferencia, enfocado en el manejo productivo y agronómico de los rubros de cebolla, melón y sandía, papas, duraznero y nectarino, ovinos y bovinos, profesionales del INIA capacitaron a asesores técnicos de los Programas SAT y PRODESAL.
Con una ceremonia de certificación, realizada el 27 de diciembre, concluyeron, en la Región de O’Higgins, las actividades del convenio de trasferencia tecnológica suscrito entre el Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA, y el instituto de Desarrollo Agropecuario, INDAP, cuyo objetivo es fortalecer y actualizar los conocimientos y competencias de los asesores técnicos de los Programas SAT y PRODESAL.
Esta iniciativa contempló la transferencia tecnológica en manejo productivo y agronómico en los rubros de cebolla, melón y sandía, papas, duraznero y nectarino, ovinos y bovinos, cuya capacitación se realizó a través de visitas prediales, días de campo, talleres y charlas técnicas, donde investigadores y transferencistas entregaron conocimientos y experiencias, contribuyendo a una mejor calidad de asesoría, con el fin de dar mayor sustentabilidad económica y social a los sistemas productivos de pequeños productores agrícolas beneficiarios de los mencionados programas.
En la oportunidad el Seremi de Agricultura, junto con instar a los profesionales de seguir capacitándose, manifestó: “con este convenio se ha dado respuesta a una inquietud que se mantuvo por mucho tiempo, como es la capacitación y el desarrollo de competencias de los profesionales en beneficio de la agricultura familiar campesina”.
Cabe señalar que el convenio de transferencia y colaboración entre ambas instituciones se inició a fines del 2015 y contempló diversas actividades de capacitación en los rubros señalados, lo que permitió mejorar las competencias de los profesionales que trabajan como extensionista y asesores de la mediana y pequeña agricultura de nuestra región.
Las actividades realizadas fueron Días Campo, Visitas prediales, charlas técnicas y talleres en las que los participantes pudieron perfeccionar conocimientos en terreno y discutir temas con sus pares de distintas zonas de la región.
