Con el objetivo de medir y disminuir la huella hídrica, Tinguiririca Energía, empresa que opera las centrales hidroeléctricas de pasada La Higuera y La Confluencia en el Valle de Colchagua, continúa avanzando en el trabajo iniciado junto a Fundación Chile, en el marco del convenio suscrito con el gobierno de Suiza, SwissAgua Andina Chile.
“Tras algunos meses de investigación ya tenemos un número que da cuenta de nuestra huella hídrica en nuestra cadena productiva: 745 litros por 1.000 kWh generados, esto incluye el uso de agua en nuestra planta de tratamiento, la huella provocada por los insumos y un pequeño porcentaje de evaporación”, explicó el gerente de Asuntos Corporativos de Tinguiririca Energía, Francisco Martínez.
“Ahora, estamos en pleno proceso de implementación de acciones para reducir este número y poner en marcha acciones de responsabilidad social en torno al agua que generen un impacto positivo para la comunidad y el medioambiente, pues creemos que una adecuada gestión del recurso hídricos es fundamental para un crecimiento sustentable y para avanzar en la gestión integrada de cuencas”, agregó.
En este sentido, Tinguiririca Energía junto a la Junta de Vigilancia del Río Tinguiririca se enfocan a implementar sistemas de gestión e información geográfica de todas las bocatomas y canales de riego en el río, aguas debajo de ellas, de forma de apoyar la mejor distribución del recurso para los regantes del valle. En una primera etapa se creará una base de datos completa de los derechos de agua asignados a la cuenca, reflejado en un trazado cartográfico y en una segunda etapa se implementarán con equipos de control para supervisar en línea y en tiempo real los caudales.
Sobre SwissAgua Andina Chile
SwissAgua Andina Chile es una iniciativa público privada que busca concientizar sobre el uso responsable del agua en los procesos productivos y avanzar en la gestión eficiente del agua por parte de los usuarios, como el caso de las empresas.
Además de Tinguiririca Energía participan Clariant, Mall Plaza, Nestlé Chile y Polpaico. El proyecto, que ya está en su segundo año, se extenderá por un total de tres, período en que la huella será medida anualmente y en el que deberán implementarse las acciones asociadas al agua y las medidas de mitigación.