Por David Pérez Arce
No es tarea fácil, a simple vista, el poder encontrar recursos para acoger a los nuevos parlamentarios que podrían llegar a la Cámara y al Senado, en caso de ser aprobado la reforma que pone fin al Binominal, pero que amplía el número de Diputados y Senadores.
Se decía, mientras se presentaba el proyecto, que no traería mayores problemas pues se estaría cubriendo esos mayores egresos con una política de ahorro, en la que deberían estar aprobando los actuales parlamentarios.
En el pedir no hay engaños. Como se le solicitó un trabajo a la Secretaria de la Cámara para conocer valores que significaría el aumento de parlamentarios, para el sector de gobierno, la oposición busca no eliminar el binominal y en la Comisión de Hacienda se aprobó, por ocho votos a favor y cinco en contra, el financiamiento de la reforma al sistema electoral.
Se eleva el número de de diputados a 155 y en el Senador serían 50, lo que es rechazado por los cinco UDI además de un RN.
Hablando de platas
El secretario general de la Cámara, Miguel Landeros, confirmó que de hacerse efectivo el financiamiento de la Reforma electoral del año 2018 sería “con cargo a las asignaciones parlamentarias”.
El impacto del proyecto es de $ 3.700 millones agregando que este tema “es imposible obviarlo en la Ley de presupuesto”.
Una de las alternativas propuestas, una es violenta y la otra es lenta. La forma violenta es que el 2017 se acuerde una rebaja de $ 3.500.000 por parlamentarios, en sus asignaciones”.
La situación es tan especial, que el Diputado UDI Patricio Melero anticipó, que de aprobarse llevará el tema al Tribunal Constitucional, agregando algo más, el parlamentario Melero en relación a esta propuesta porque a su juicio se atenta “contra la estabilidad democrática del país”.
Un análisis a los 100 primeros días
El Instituto Libertad ha realizado un análisis del cumplimiento de las 56 medidas para los 100 primeros días de Gobierno de Michelle Bachelet y según lo expresa en un artículo firmado por el abogado Jorge Acuña Díaz el “gobierno de Bachelet no cumple con la cifra de 84%, sino que ha cumplido con un 29% de sus compromisos, sin que se haya visto nada concreto hasta el momento, como lo ha podido apreciar la opinión pública durante este tiempo”.
Va más a fondo y finaliza su análisis señalando:
“Más importante aún es que si clasificamos las medidas según el tiempo en que los anuncios se llevarán a efecto, el 35,71 % de las medidas anunciadas por el Gobierno de Michelle Bachelet no tienen fecha de aplicación real, seguido de un 32,1% de medidas que se cumplirán entre 2014 y 2018, un 17,86% que se está aplicando actualmente, en el 10,71% se aplicarán en algún punto del año en curso y un 3,57% que se cumplirá más allá del 2018”.
